La eventual renegociación del Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) y la construcción del muro fronterizo entre Estados Unidos y México, decretadas por el nuevo presidente de ese país, Donald Trump, no sólo han revivido el sentimiento antiestadounidense, sino que predispuesto a la gente a consumir productos hechos en México.
Esta coyuntura es una “extraordinaria oportunidad para que las micros, pequeñas y medianas empresas (mipymes) del país florezcan”, exponen expertos. Y es que según datos de Comce, sólo 13% de las pymes que hay en el país aspiran a ser proveedoras de grandes empresas.
Sólo hecho en México
Si un sector sabe el valor de contar con proveedores nacionales, es el de las franquicias. José Luis Navarro Chinchilla, presidente de la Asociación Mexicana de Franquicias (AMF), que agrupa a más de 1,300 firmas que operan en el país, explica que 85% de éstas son marcas mexicanas, cuya cadena de suministro es 100% nacional.
Esto sucede desde hace por lo menos 10 años, señala en un correo Ferenz Feher, CEO de Feher & Feher. Incluso, las marcas extranjeras trabajan con proveedores locales, como MacDonald’s, que compra sus cocinas a un proveedor de San Luis Potosí.
Navarro Chinchilla es también propietario de Finca Santa Veracruz, un corporativo con 18 años de existencia y cerca de 140 sucursales. Su cadena de suministro, con 100 proveedores, es en su totalidad mexicana.
“El único insumo que importamos era un polvo para una receta de capuchino. Es nada, es más, hasta la podríamos quitar”, señala el presidente de la AMF, quien sin embargo, sostiene que sí hay presión por el tipo de cambio, ya que el café en un commodity sujeto a precios internacionales.
“Evidentemente habrá un aumento en los precios de algunos productos… tiene que ver con la logística, la gasolina y otras variables que han impactado la cadena de suministro”, expone.
El líder empresarial confía que, ante el actual panorama económico, el consumidor privilegiará a las empresas mexicanas, cuyos beneficios económicos se queden en el país. Consultado sobre el llamado en redes sociales a boicotear firmas como Starbucks, Navarro Chinchilla declara: “el que se lleva, se aguanta”.
Y abunda: “Las consecuencias -de las medidas anunciadas por Estados Unidos- van a afectar negocios, marcas que no son 100% mexicanas, va a afectar el mal humor social y hay una razón de fondo, por eso repito ‘el que se lleva, se aguanta’…. Lo digo como mexicano, no soportaremos nunca que a nuestro país se nos trate diferentes, debemos llegar a la negociación y al diálogo respetuoso. Éste no es un país servil y si el maltrato de una nación a otra ocurre en circunstancias donde los negocios son parte inminente de la relación, yo creo que como mexicanos vamos a tomar cartas en el asunto”.
Hace unos días Alsea, operadora de Starbucks, emitió un comunicado en el que defendió la labor de la cadena de cafeterías. Recordó que en México cuenta con 533 tiendas. En su portafolio de marcas también están Domino’s Pizza, Burger King, Chili’s, California Pizza Kitchen, P.F. Chang’s, Italianni's, The Cheesecake Factory, Vips, El Portón, Archie’s, Foster’s Hollywood, Lavaca, Cañas y Tapas. Tan sólo en México generan 44,000 empleos, además de trabajar con más de 500 proveedores, 70% de los cuales son nacionales.